La extraordinaria evolución de este precioso material, entre la leyenda y la historia desde los egipcios hasta los romanos y desde las vidrieras góticas hasta los hornos de fundición venecianos del Renacimiento, emulados de belleza a finales del siglo XVII por los cristales de Bohemia, en el siglo XX asimismo por su desarrollo excepcional del arte del vidrio gracias al At Nouvau y a las realizaciones más modernas que han tenido lugar en los últimos 50 años, sigue siendo un material fascinante; y todos en algún momento tenemos alguna pieza de vidrio, un recuerdo familiar, una antigüedad, y que desafortunadamente se nos rompió, fracturo o daño.

Con el objetivo de volverla a lucir su pieza de vidrio o vitral, ofrecemos el servicio de revivir su belleza, restaurándolas nuevamente, sin desaparecer las cicatrices de los daños; sin embargo, podemos volver a disfrutarlas viviéndolas en pie o funcionando nuevamente.